Abstracto traducido de un estudio médico publicado en pubmed.gov (Biblioteca nacional de medicina de U.S.)
Trasfondo: La investigación sugiere que el perdón está asociado con una mejor salud física y fisiológica y en particular con la función cardiovascular. A pesar de estos hallazgos, la mayoría de los estudios sobre el perdón están realizados sobre personas sanas.
Propósito: El presente estudio trató la correlación psicológica y fisiológica en individuos con enfermedad de las arterias coronarias.
Método: Se estudió el perdón autoreportado, el estrés percibido, la ansiedad y depresión y datos fisiológicos incluyendo los triglicéridos, el colesterol total y el colesterol de alta densidad y baja intensidad de lipoproteínas (HDL y LDL) de 85 pacientes hospitalizados por enfermedad de las arterias coronarias.
Resultados: Los niveles más altos de perdón se asociaron a niveles más bajos de ansiedad (p < 0,05), depresión (p < 0,01) estrés percibido (p < 0,005) así como a un nivel más bajo del ratio de colesterol total y de HDL y LDL (ambos a p < 0,005) después de controlada la edad y el sexo. Los indices psicológicos no mediaron en la relación entre el perdón y el colesterol. Conclusiones: Los resultados sugieren que la correlación psicológica del perdón es similar en pacientes con problemas cardíacos y en individuos sanos. Además, entre los pacientes, el perdón podría estar asociado con un riesgo reducido de futuros problemas cardiovasculares.
O lo que es lo mismo en un lenguaje menos científico: Perdonar es bueno para la salud emocional y además es bueno para la salud del corazón. Es bueno tanto para el corazón en el sentido poético como para el corazón en el sentido físico.
Perdona, es por tu bien.
Trasfondo: La investigación sugiere que el perdón está asociado con una mejor salud física y fisiológica y en particular con la función cardiovascular. A pesar de estos hallazgos, la mayoría de los estudios sobre el perdón están realizados sobre personas sanas.
Propósito: El presente estudio trató la correlación psicológica y fisiológica en individuos con enfermedad de las arterias coronarias.
Método: Se estudió el perdón autoreportado, el estrés percibido, la ansiedad y depresión y datos fisiológicos incluyendo los triglicéridos, el colesterol total y el colesterol de alta densidad y baja intensidad de lipoproteínas (HDL y LDL) de 85 pacientes hospitalizados por enfermedad de las arterias coronarias.
Resultados: Los niveles más altos de perdón se asociaron a niveles más bajos de ansiedad (p < 0,05), depresión (p < 0,01) estrés percibido (p < 0,005) así como a un nivel más bajo del ratio de colesterol total y de HDL y LDL (ambos a p < 0,005) después de controlada la edad y el sexo. Los indices psicológicos no mediaron en la relación entre el perdón y el colesterol. Conclusiones: Los resultados sugieren que la correlación psicológica del perdón es similar en pacientes con problemas cardíacos y en individuos sanos. Además, entre los pacientes, el perdón podría estar asociado con un riesgo reducido de futuros problemas cardiovasculares.
O lo que es lo mismo en un lenguaje menos científico: Perdonar es bueno para la salud emocional y además es bueno para la salud del corazón. Es bueno tanto para el corazón en el sentido poético como para el corazón en el sentido físico.
Perdona, es por tu bien.
Extracto científico original: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/19229635
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