Cuando un cachorro muerde a su madre, la madre da un aullido. El cachorro puede verse sorprendido por la reacción, pero es posible que intente morder a su madre por segunda vez. Esta vez la madre aullará aún más fuerte e incluso puede gruñir al cachorro mientras lo aparta de él y lo ignora. Muchos cachorros captan el mensaje de que la madre no quiere ser mordida, la madre puede ponerse un poco más agresiva con ellos la próxima vez.
La forma humana
La manera humana de implementar la solución de los perros es lanzar una advertencia, parecida al aullido, con voz aguda cuando el cachorro trate de morder ("¡¡Quieto!!"). Puede incluso exagerarse para que el animal lo entienda bien.
Si la costumbre de morder continúa, ignora al cachorro durante un tiempo y deja de jugar con él. Si aún continúa, debes seguir ignorando a tu perro. No debes consentirlo o darle a entender que no pasa nada y que se comportamiento es normal, sino todo lo contrario: El perro debería darse cuenta que las mordidas llevan a que la diversión se acabe. Debe darse cuenta que morder a la gente no es aceptable.
Otra alternativa a las mordeduras es el bozal. Puede sonar cruel, pero un bozal no dañará a tu perro. En lugar de eso está ahí para enseñarlo a no abrir su boca para morder a la gente. Una vez aprende a no morder, el bozal puede quitarse.
Un perro que muerde es uno de los problemas más serios que un propietario puede tener, el jugar a morder puede conducir a morder de verdad, y debe ser evitado inmediatamente antes de que algo serio suceda.
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